miércoles, 23 de marzo de 2011

Instantes


Él la miró a los ojos. Ella le miró también, fugazmente, y le dijo “no me mires así”. Él tomó la mano derecha de ella entre las suyas y la acarició despacio. La voz de Billie Holiday se fue alejando, al igual que la figura de los demás clientes del bar. Pasaron entre las nubes unos instantes y él dijo “te quiero” acercando sus labios a los de ella. Cuando sus bocas se separaron, el mundo estaba allá abajo, muy lejano.

Ella le preguntó “¿cómo volvemos?”. “¿Para qué?”, dijo él.

2 comentarios:

Anita Dinamita dijo...

No sabes lo que me alegro de que hayas vuelto, aunque antes yo no estaba, me encanta lo que estoy leyendo!!! y lo que voy a aprender.
Un abrazo

mediterráneo dijo...

Anita, que como le decía a Rocío, publico entradas y no veo los comentarios. Hoy me he enterado al entrar.
Yo sí que estoy aprendiendo de vosotras.
Un beso.